El mapa que vamos a comentar es de naturaleza histórico-política, y se trata del reparto de África a manos de
los países europeos; por tanto, la localización espacial la debemos referir al
continente africano, que es el que se nos representa en la imagen, mientras que
la localización temporal abarcaría gran parte del siglo XIX.
Con respecto al
análisis de los elementos que aparecen en el mapa, vemos que los distintos
países colonizadores aparecen representados en un cuadro situado abajo, a la
izquierda, y podemos distinguirlos con distintos colores:
ü Las posesiones británicas están reflejadas en verde.
ü Las francesas en morado.
ü Las alemanas en un verde claro.
ü Las portuguesas en amarillo.
ü Las españolas en rojo.
ü Las belgas en marrón.
ü Las italianas en azul.
ü En rosa aparecen los estados que permanecieron independientes.
¿Y cómo se
repartieron estas potencias europeas el mapa africano? Está claro que la
potencia hegemónica era Gran Bretaña, que tenía sus posesiones a lo largo del
continente, en un intento de unir El Cairo, en el norte, con Ciudad del Cabo,
en el sur. Los británicos aseguraron su presencia en Egipto, Sudán, Uganda,
Kenia, la Somalia británica, Nigeria, Costa
de Oro, Sierra Leona, Zanzíbar, Socotora, Niasa, las dos Rhodesias,
Bechuania y la Unión sudafricana.
Por su parte, los
franceses se convirtieron en la segunda potencia colonial en África, e
intentaron unir sus posesiones de oeste a este. A Francia pertenecían los
territorios de Marruecos, Argelia, Túnez, el África Occidental francesa, el África
Ecuatorial francesa (dividida en dos territorios), la Somalia francesa, las
islas Comores y Madagascar.
Alemania, que había
empezado su carrera colonial tarde debido a que hasta 1871 no se conformó como
país, tomó posesión de Togo, Camerún, Tanganica
y el África del Sudeste.
Las dos potencias coloniales
clásicas, España y Portugal, redujeron su presencia en África debido a su
decadencia. España retuvo el norte de Marruecos y el Sáhara español, así como
la Guinea española. Los portugueses, por su parte, se hicieron con el poder en
Angola, Mozambique, Cabinda y la isla de Santo Tomé.
Los belgas se
establecieron en el Congo, en pleno centro del continente, y los italianos,
tras su unificación, se hicieron con territorios en Libia, Eritrea y la Somalia
italiana. Finalmente, solo dos territorios conservaron su independencia:
Etiopía y Liberia.
Si pasamos al
análisis de los antecedentes históricos, hemos de decir que el colonialismo en África
comenzó más bien tarde, pues hasta las primeras décadas del XIX solamente el
norte era conocido, situación que fue cambiando gracias a los descubrimientos
geográficos de diversas expediciones, como la protagonizada por David
Livingstone. En cualquier caso, el hecho fundamental para el reparto colonial
de África se produjo a partir de la Conferencia de Berlín (1884-1885), que
estableció como legal la ocupación efectiva del territorio por parte de
aquellos países que tuvieran capacidad de llevarla a cabo.
En lo tocante al
análisis de las causas que llevaron a los europeos a colonizar el continente
africano, tendríamos que hablar de cinco factores clave:
ü Los factores económicos (búsqueda de nuevos mercados y de materias
primas).
ü Los factores tecnológicos (a partir de la mejora del transporte y de las
comunicaciones).
ü Los factores demográficos (crecimiento de la población europea).
ü Los factores políticos (protección estratégica de los territorios
conquistados y la visión de las colonias como elementos de prestigio).
ü Los factores ideológicos (la justificación de la preeminencia del hombre
blanco sobre las demás etnias y pueblos del mundo).
La evolución del proceso colonialista no fue
fácil, pues enseguida aparecieron diversos problemas. En primer lugar, hay que
destacar la rivalidad de británicos, franceses y portugueses, que se dirimió en
dos incidentes graves: la crisis del ultimátum (1890), que enfrentó a
británicos y portugueses por el territorio intermedio entre Angola y
Mozambique, y sobre todo el incidente de Fachoda (1898), que produjo un
enfrentamiento entre ingleses y franceses que a punto estuvo de convertirse en
guerra.
¿Qué consecuencias tuvo el Imperialismo? Pues
primeramente provocó una competencia feroz entre los países colonizadores,
que veían en los territorios colonizados
un elemento fundamental para obtener beneficios económicos y demográficos. Sin
embargo donde más se notó el Imperialismo fue en los países colonizados, que
sufrieron una europeización de sus costumbres… Pero solamente en las capas
altas de la sociedad, pues la sociedad en general sufrió la marginación
cultural y social, la subordinación económica y vivió en primera persona
diversos conflictos territoriales.
Personalmente creo que el movimiento
colonialista reflejó lo peor de los europeos durante el siglo XIX, pues
escudados en teorías pseudocientíficas y en una supuesta supremacía del hombre
blanco, explotaron sin contemplaciones a las tribus y pueblos africanos,
cambiando por completo la idiosincrasia del continente africano. Nadie mejor
que Kipling lo resumió (y justificó) en su poema The White man’s burden: Llevad
la carga del hombre blanco. / Enviad adelante a los mejores de entre vosotros;
/ Vamos, atad a vuestros hijos al exilio / para servir a las necesidades de
vuestros cautivos; / para servir, con equipos de combate, / a naciones
tumultuosas y salvajes.